lunes, 10 de diciembre de 2012

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LA EDAD DE ORO

Nadie hubiera vaticinado hace tres años que un equipo recién pasado por Ley concursal, en Segunda División, y con una plantilla de veteranos de los cuales se decía en algunos casos que estaban "acabados" para el mundo del fútbol, pudiera ascender a Primera. Las probabilidades que daba la gente de que ese equipo, con una plantilla tan veterana y sin fichajes de relumbrón se mantuviera en Primera eran aun menores, más si cabe que en la primera vuelta estaban en descenso y con el artífice del ascenso al borde del K.O.

Sin necesidad de cambiar de entrenador se salvaron holgadamente en un sprint final digno de aplaudir, un año después, con las mismas ganas e ilusión, pero con entrenador nuevo, nadie daba un duro por ese equipo. El objetivo de la Permanencia parecía una quimera con una plantilla un año más vieja, sin grandes estrellas y con nuevo entrenador, procedente de Segunda. Se salvaron de calle no, lo siguiente. Llegaron a ir líderes de Primera en las primeras jornadas, a estar gran parte del campeonato en zona Champions, y concluyeron el año con su primer clasificación para Europa.

¿Qué opciones le darían a esa plantilla, un año más veterana de volverse a salvar un año más de calle, jugando varias competiciones? ¿Y de pasar de ronda en Europa League? Las respuestas están saliendo poco a poco. El Levante de Juan Ignacio Martínez, Alias JIM para la prensa, (aunque sería injusto nombrarle solo a él sin recordar a gente que ya estaba en segunda con este equipo como Ballesteros, Juanlu, Juanfran, Iborra o Pallardó) no contento con las hazañas que se han narrado en los dos primeros párrafos, ha logrado pasar de ronda en Europa League, con tan solo una derrota en los seis encuentros de grupo, aunque terminó segundo de grupo. En copa del Rey han pasado de ronda. Y en liga...

En liga nada ha cambiado. Sextos clasificados tras quince jornadas, 24 puntos. Están haciendo una campaña algo peor que la del año pasado pero eso entraba de sobra dentro de la lógica. Jornada a jornada se siguen superando. A mi alrededor solo escuchaba un "ya caerán", "Ya verás como a final de liga pasan apuros para salvarse" y comentarios del estilo. El bonito sueño ya acabará. Pues no señor, no ha terminado. El cuento de hadas de este equipo al que muchos calificarían de "carrozas", "dinosaurios" y calificativos del estilo sigue en marcha. Clasificados para la siguiente ronda en Europa, con más de medio trabajo hecho para seguir un año más en Primera, y por si eso fuera poco, en puestos europeos, peleando un año más con los mejores. Tienen magia.

La magia no se debería achacar únicamente al entrenador que les tuvo líderes, si no al que empezó a poner los cimientos de este Levante, que es el equipo más veterano de Primera holgadamente (y con renovaciones eternas de gente que ya está más cerca de los 40 que de los 30). Luís García Plaza, ahora en el Getafe fue el hombre milagro del ascenso, y al año siguiente hizo un final de liga espectacular. Tanto es así, que entre su trabajo para salvar al equipo hasta junio de 2011, y el de JIM en los primeros cuatro meses de la siguiente temporada, el Levante fue el tercer mejor equipo de ese año 2011, no hace falta decir quienes fueron los dos primeros. Pero es que lo fue con diferencia con el resto.

2012 no fue tan bueno, pero la renta que tuvieron en el inicio de liga la mantuvieron para conseguir terminar en puestos europeos. Y en esta continuación del año ahí arriba siguen. El Levante tiene algo que se escapa a cualquier lógica. No sirve de nada hablar del juego algo marrullero que pueden practicar, ya que tienen un equipo lleno de teatreros y defensores que en otros equipos ya se llevaron su fama, con el incombustible Ballesteros a la cabeza. Un equipo que ya cuando ascendió tenía fama de ser un poco "guarrete" y que no ha perdido esa imagen.

Pero con eso no se queda 6º en una Liga y se sigue en ese puesto tras 15 jornadas de la siguiente. El Levante tiene mucho más. Tiene a gente en una segunda juventud, como es el caso de Juanlu o Barkero, dos jugadorazos en este equipo, en el caso del ex canterano de la Real, su renacer futbolístico se inició cuando el Numancia lo fichó para Primera y se destapó como goleador. Tres años en Soria hasta terminar contrato, ya que nadie quiso pagar por llevárselo (a pesar de rumores) y llegó al Levante. Se hizo con sus servicios, se rumorea, porque le lanzó un ultimatum, supuestamente Barkero (que quería jugar en primera) esperaba a Osasuna y Real; pero estos no estaban matemáticamente salvados y el Levante sí.

Aceptó y no podría haberle salido mejor. A sus 33 años es una estrella allí, ha jugado en Europa por primera vez y es el encargado de mover el juego ofensivo del equipo, además de lanzar faltas y penaltys. Pero este Levante, rocoso y serio atrás y oportunista cuando hace falta tiene una estrella en su delantero: Martins. No importa, hace dos años cuando se salvaron el héroe fue el inadaptado Caicedo, y el año pasado tuvieron a Koné, que en el Sevilla no valía y en Levante se hinchó a goles.

Algo de magia tienen también en ese aspecto en Levante, con dos delanteros que no parecían funcionar, y sacaron petroleo. A Koné lo ficharon en propiedad para venderlo. Un trato de favor del delantero hacia el club que le catapultó a un contrato majo. Y se trajeron con el mercado concluido a Obafemi Martins, que estaba sin equipo, un delantero que llevaba años sin cazarlas. En el Wolsburgo seis goles, en el Rubin Kazan dos, y durante su cesión en Birminghan, apenas olió cesped, pero en copa anotó dos tantos. Llegó a Levante lejos de su mejor momento en su carrera deportiva y está volviendo a renacer.

Seis tantos en el arranque liguero, los mismos que en el Wolfsburgo en una campaña. Delantero centro indiscutible e insustituible en un equipo que vivirá del juego del contraataque, donde la velocidad del nigeriano será importante. Sus goles bien pueden valer una salvación... o quien sabe si más cosas.

El último arreón de este equipo ha sido el 4-0 al Mallorca de Caparrós, que deja al ex entrenador del Athletic tocado. En ese partido el Levante salió con cinco jugadores que superan claramente la treintena: Munúa (34), Ballesteros (37), David Navarro (32), Juanfran (36) y Barkero (33); y eso que faltaba Juanlu, que acostumbra a jugar.

No es el único detalle a tener en cuenta. De los catorce jugadores que pisaron el cesped, hubo nueve valencianos, seis de ellos titulares: Ballesteros, D.Navarro, Juanfran, Iborra, Michel Herrero y Rubén García; y los tres suplentes que saltaron al cesped: Rodas, Pallardó y Roger. Fuera de eso, los que están marcados a dar el punto extra: Munúa, Barkero, El Zhar y Martins; además del lateral derecho Lell, fichado esta temporada. Quizás sea otro de los motivos de que el equipo funcione, un equipo de gente que se siente como en casa porque viven en su tierra, y unos fichajes acertadísimos por cuatro duros, a los que sacar partido. Veremos hasta donde llega el Levante esta temporada y venideras. Pero de momento no parecen haber bajado el ritmo.

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