miércoles, 21 de noviembre de 2012

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LLORENTE: GUERRA TOTAL

Una más en la historia sin fin entre el Athletic y Llorente. Esta vez con un medio de comunicación de por medio. La tan anunciada entrevista del riojano el lunes noche en Telebilbao ha generado un nuevo torrente de comentarios, muchos de ellos críticos una vez más con el antaño conocido como "Rey León". Además sus actos en el Bernabéu y su deplorable estado de forma no han ayudad a que la gente recapacite y sumen apoyos para su causa.

Antes de esa entrevista televisiva el club decidió pasar a la carga y dejar las buenas intenciones a un lado, esas que buscaban un cambio en la idea del 'nueve' zurigorri de abandonar la institución en julio. Horas antes de que el programa arrancase el canal oficial en Twitter del Athletic (@AthleticClub) anunciaba que Llorente se negaba a salir en rueda de prensa junto a su compañero Aurtenetxe como así se lo pidió el club. 

La ausencia del ahora delantero suplente no es nueva, de hecho su no presencia ante los medios de comunicación locales durante lo que va de temporada raya la ofensa. Pero por supuesto una negativa más no era algo novedoso. Sí que el club lo publicase, algo que está en su derecho de hacer pero que no suele realizar normalmente, teniendo en cuenta que excusarse para no salir en rueda de prensa tiende a ser habitual en la primera plantilla del club bilbaíno.

¿Qué ocurrió para que el club cambiará de planteamiento y pasara a la carga con Llorente? Los diferentes actos del riojano en el Bernabéu no gustaron nada a la directiva rojiblanca. Responder con aplausos los gritos de apoyo que recibió de la grada merengue no gustó en Bilbao. Menos aún tras ver como sus compañeros Susaeta y Gurpegui eran constantemente insultados durante los 90 minutos. Le faltó tacto a un jugador que siempre ha pedido un trato especial, un cariño extra que su entorno aseguraba no notar.

Volvamos a la entrevista. Primera que concede el jugador ante un medio local y seguramente escogió el más cómodo posible para sus intereses. La línea seguida en la redacción de deportes de Telebilbao consiste en criticar toda decisión de Marcelo Bielsa y la actual Junta Directiva. Por tanto era bastante complicado que Llorente tuviera una entrevista dura en un medio hostil contra las personas que gobiernan en Ibaigane y Lezama. Y así fue.

Si alguien esperaba preguntas incómodas, no era el canal adecuado. Solo una existió e incluso se allanó el camino para la respuesta. Todo lo demás consistía en un lavado de imagen para el riojano, amén de recordar sus años en el Athletic (con algún que otro error por parte del periodista). Por tanto esos minutos audiovisuales decepcionaron y mucho al grueso de aficionados rojiblancos. 

Y aún así al de Rincón de Soto le dio para dejar alguna otra perla que nos permite sacar algunas conclusiones. Como por ejemplo el motivo que dio para no renovar su contrato con el club que le ha criado futbolísticamente hablando. Básicamente culpó a los medios de comunicación locales de su decisión de no renovar. Alegó que "no le gustaba como se le estaba tratando". Afirmó además  que "los mensajes de la prensa hacía mí han sido muy malos y no han ayudado a que las cosas fueran por buen camino. Y ante todo lo que estaba pasando le dije (al presidente) que no quería seguir"

Nada de cuestiones monetarias elevadas ni peticiones exageradas de comisión de su representante, no. La prensa como culpable de todos sus males. Y esto tras una temporada en la que fue ampliamente alabado por su rendimiento y actitud liderando a un grupo joven. Nada sobre el aletargamiento que vivía su proceso de renovación, alargado demasiado en el tiempo ante la negativa del jugador a aceptar las diversas ofertas de renovación llegadas a su mesa por parte de dos Juntas Directivas diferentes.

Debido a ese 'mosqueo' que tenía el jugador con el maltrato que a su juicio sufría por parte de los periodistas que siguen a diario la actualidad rojiblanca decidió que lo mejor era no hablar ante ellos. Ni ruedas de prensa ni entrevistas. El objetivo era "no armar jaleo" y "no perjudicar al equipo". Pero debe ser que los medios estatales ahí no contaban. Porque cuando le ha interesado sí ha hecho uso de esos periodistas más lejanos al día a día del Athletic para expresarse y dejarse ver. El veto solo lo tenían los bizkainos.

Disparidad de criterios en busca de un interés muy concreto. Llorente debe estar realmente mal asesorado. Se duele de la falta de cariño en su casa y decide no solo no buscarlo aquí si no salir a encontrarlo fuera, en un gesto que ni gusta ni gustará a la parroquia rojiblanca, que no olvidemos es quien le paga. 

Otro aspecto a destacar de la entrevista es ese momento en el que se le pregunta por sus aplausos a la grada del Bernabéu. Intento quitarle hierro al asunto alegando lo siguiente: "la grada de ese lado del campo me dio una gran ovación, a la cual quise hacer un gesto de agradecimiento porque son conscientes de que no lo estoy pasando bien y como campeón del mundo y de Europa que soy me querían apoyar. Si la gente me trata así será porque he hecho las cosas bien".

Que un jugador del Athletic decida aplaudir a la tribuna del Bernabéu es algo que en Bilbao duele sí o sí. Porque en el 'Botxo' se considera al Real Madrid el máximo rival, a pesar de las diferencias deportivas tan palpables hoy en día. Con una larga trayectoria en Lezama y la primera plantilla decidió realizar ese gesto, considerado casi como un acto de guerra en San Mamés. Poco menos que un gesto definitivo que demuestra las pocas ganas del jugador por seguir en el club bizkaino.

No solo eso si no que además no admite errores: "si la gente me trata así será porque he hecho las cosas bien". La sonora pitada que previsiblemente recibirá este domingo en caso de disputar minutos ante el Deportivo será una clara muestra de que la afición zurigorri está, entonces, equivocada. Las culpas, a fin de cuentas, deben ser de otros por lo que Fernando Llorente asegura. Y de su bajo rendimiento y su notorio escaso nivel de forma ni una palabra.

Vemos por tanto poca capacidad de reflexión en el que ha sido una referencia durante cinco años en el Athletic. Lo de cantar el 'mea culpa' es por tanto un imposible. Balones fuera y a seguir aguantando. La sensación en Bilbao y Bizkaia es que ha faltado el respeto a la institución y a sus compañeros. Si esta temporada ha vivido en un territorio hostil, lo que sufrirá a partir de ahora puede estar muy cercano a la tortura.

Por fin ha hablado y no ha dejado contento a nadie. Además, nos quedamos con ganas de escucharle responder a muchas otras preguntas. Pero ese es otro cantar. El primer plebiscito llegará este domingo a las cinco de la tarde. Cada vez la grada está más predispuesta a que se cumplan los deseos del jugador y que así salga de Bilbao cuanto antes. San Mamés dictará sentencia.

Imagen: Athletic Club

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