Segunda semifinal europea en la historia del Athletic y enfrente se encuentra el Sporting de Portugal. Para muchos de los cuatro equipos en esta última ronda antes de la gran final los portugueses son el conjunto más flojo. La diferencia entre campeonatos sirve para generar la sensación de que los bilbaínos son bastantes superiores a los lisboetas. ¿Es así? Superiores quizá pero añadirle un grado superlativo a ese favoritismo es cuanto menos osado. Pero ¿qué tendrán que combatir los vizcaínos en los próximos 180 minutos? Desgranamos al Sporting para que a ninguno de nuestros lectores le pillen por sorpresa las virtudes y defectos de los otros leones.La principal seña de identidad del equipo entrenado por Sa Pinto es bastante conocida ya por los seguidores rojiblancos. Partiendo de un 4-2-3-1 inicial hacen del repliegue y la espera su gran arma. Será complicado por no decir imposible verles defender con la primera línea de presión más allá del círculo central. Una vez el conjunto rival alcanza la zona central la exigencia en la presión que pide el técnico portugués es alta y ninguno de sus futbolistas queda eximido de tal responsabilidad. Y de ahí a correr. Jugadores veloces que aprovechan esa característica, dejando a un lado la combinación en la fase inicial del ataque. De asociarse ya se realizará cerca del área rival, en este caso en la del Athletic.
Habrá quien piense que regalan el balón sin ningún tipo de pudor. Ojo con esa sensación. Es fácil verles dominar un encuentro despreciando el esférico como acostumbran especialmente cuando juegan como locales. Lo lograron por ejemplo ante el Metallist, y el City, mientras que como visitantes lo hicieron ante el Benfica en la Liga Sagres.
Defensivamente será habitual verles cambiar el 4-2-3-1 inicial del dibujo por una especie de 4-2-4. Los dos jugadores de banda, Izmailov en derecha y Capel en izquierda, adelantarán sus posiciones para evitar que el equipo rival consigue avanzar de manera cómoda por los laterales. Por su parte, Matías Fernández igualará su posición con Van Wolfswinkel para hacer lo propio con la unión entre centrales y medio centro en la creación de fútbol rival. En caso de verse superados o ante la vista de esa amenaza, la línea de tres que precede al delantero holandés recuperarán su lugar inicial para ayudar a los compañeros de posiciones más retrasadas.
Cuando el rival del Sporting supera esa primera línea de presión habrá un posible baile entre los dos medios centros. Schaars estará más liberado en ese sentido pero Carriço (central reconvertido) hará la función de tercer central en caso de ser necesario, realizando cualquier cobertura que necesite alguno de sus centrales en caso de perder estos su posición o caer a banda para echar una mano a los laterales. Teniendo en cuenta todo esto, será muy complicado que una vez pierdan el balón el Athletic vea por delante menos de 5 futbolistas para llegar al área rival. Pero habrá que ver como son capaces de afrontar la presión de un equipo como el Athletic, que no duda en salir allá donde sea necesario para recuperar el cuero.
Terminando con el aspecto defensivo, es el equipo lisboeta un equipo duro, que no duda en parar el juego si se ven superados o ante una posible contra del rival. Las faltas tácticas son una constante. Y repetimos, no son unas madres, se verán entradas duras, bordeando el límite. Los rojiblancos deberán igualar ese nivel si el colegiado no frena ese aspecto. Y algo a lo que los seguidores bilbaínos están acostumbrados como el perder el balón y que sus futbolistas vuelvan rápidamente para intentar el robo se repite en el Sporting, donde no será extraño ver hasta tres futbolistas apretando al dueño del esférico para evitar una jugada cómoda o al menos el inicio de ella.Por tanto las intenciones de Sa Pinto son claras, conseguir que su equipo frene el alto ritmo que buscarán los de Bielsa y que estos se vean obligados a jugar en estático. Ahí se encuentran mucho más cómodos. Pero a favor de los bilbaínos está el hecho de que su juego ofensivo está muy trabajado y que los automatismos son una constante del fútbol rojiblanco. Servirán más que nunca para superar la defensa lisboeta.
¿Y ofensivamente? El principal arma es la salida rápida tras el robo. Sus futbolistas, especialmente Matías Fernández y Capel, conducen el balón buscando recorrer la mayor distancia posible para llegar al área rival. La asociación la dejan para esos 30 metros finales. Pero claro, esto no siempre es posible. En ese caso dejarán la labor de creador en manos del holandés Schaars, buen futbolista pero más volante que organizador. Un Cocu en miniatura por así decirlo. Aplicado, de buen despliegue, con buen manejo de la pelota pero que no puede cargar con el peso ofensivo del equipo por si solo. El es la primera opción del Sporting cuando toca crear con pausa y no hay opción de salir rápido.
Ahí se verán las carencias de los verdiblancos. Cuando esto no sea posible, algo que ocurrirá bastante si los de Bielsa hacen un partido en su línea habitual, la siguiente opción será la salida por el lateral. Estos no dudarán en buscar el balón largo tanto en la búsqueda de su compañero de banda como de Van Wolfswinkel. Por tanto, evitando que salgan rápido los de San Mamés pueden tener mucho ganado.
En ataque fían todo a los cuatro jugadores más adelantados. En bandas Capel, quien no necesita presentación, en la lucha constante por llegar a línea de fondo, Izmailov en la derecha, de mucho peligro en las internadas al área, más vertical y cumpliendo por momentos la función de segundo delantero desde ese lado del campo. En punta Van Wolfswinkel, buen rematador y con presencia en el juego aéreo. Por detrás dirigiendo a todos ellos Matías Fernández, al que bien conoce Marcelo Bielsa de su etapa en Chile. A estos se les sumará alguno de los dos laterales, bien Joao Pereira por la derecha o Insúa por la izquierda. Nunca los dos a la vez y muy raramente alguno de los dos medios centros supere la línea imaginaria de tres cuartos de campo.
No será sencillo conseguir el pase a la final. Nunca puede serlo a estas alturas de la competición. Pero con el Sporting de Portugal se presentan algunas de las características que más daño han hecho al Athletic este año. No son uno de los mejores equipos de Europa ni mucho menos y adolecen de falta de banquillo, pero aún así son un buen conjunto. Así que paciencia y a trabajar duro. Ellos no van a dar nada por perdido esté el marcador como esté, mande quien mande en el juego. No será un paseo.
Será una sorpresa si el Sporting no sale con el siguiente once: Rui Patricio; J. Pereira, Xandao, Polga, Insúa; Carriço, Schaars; Izmailov, M. Fernández, Capel; Van Wolfswinkel.
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